Evaluación del desempeño. El plan de evaluación de los recursos humanos de la Generalitat de Catalunya

El presente artículo tiene por objeto presentar la experiencia de la Generalitat de Cataluña en el diseño, puesta en marcha y utilización de la evaluación del desempeño entre el personal al servicio de su Administración. La finalidad del artículo es, sin embargo, algo más pretenciosa: se pretende facilitar la reflexión sobre los claroscuros de esta experiencia. La evaluación del desempeño, como otros instrumentos de la gestión de personal, puede convertirse, para cualquier Administración pública, en una verdadera "palanca de cambio", o instrumento de mejora permanente, si se acierta en su utilización. Se trata de un instrumento que potencialmente tiene una gran capacidad de introducir modificaciones (positivas) en la organización al actuar directamente sobre el comportamiento de las personas. Sin embargo, las experiencias de muchas Administraciones y organismos públicos demuestran la facilidad de convertir este instrumento en un proceso burocrático de muy reducido impacto. En consecuencia, es especialmente interesante conocer factores de éxito y fracaso, fallos más comunes y aciertos más significativos de otras experiencias. Esta es la finalidad del presente artículo: favorecer la capacidad de aprendizaje interorganizativo. El específico caso que presentamos tiene atractivos, pero a su vez importantes limitaciones: no espere el lector encontrar en este caso una experiencia de evaluación del desempeño exitosa y con gran tradición e impacto: nos encontramos a menos de dos años de su inicio por lo que su impacto es, todavía, de difícil evaluación. La utilidad de la experiencia que se presenta radica en que se trata de una situación peculiar en el mundo de las organizaciones pero, por otra parte, muy común en las Administraciones públicas españolas, como es una falta importante de hábito de evaluación personalizada entre el personal al servicio de la Administración. A esta peculiaridad hay que añadir el gran tamaño y heterogeneidad que caracteriza, como es el caso de otras Comunidades Autónomas, a la Administración de la Generalitat: 110.000 empleados públicos, 1,6 billones de presupuesto, y más de un centenar de unidades directivas, con contenidos funcionales muy dispares. El caso presenta una aplicación de la evaluación del desempeño donde ésta se modula y adopta aquella variante que la puede hacer realmente útil a medio plazo para organizaciones con las características antes citadas. Para hacer posible la finalidad perseguida con este artículo, hemos estructurado el presente trabajo en diversos apartados. La parte nuclear son los apartados cinco y seis. En el cinco se realiza una descripción pormenorizada de los objetivos, gestación, contenido de la evaluación y otros extremos relevantes del diseño del sistema y de su puesta en marcha. En el seis, se describe la situación actual y primera valoración del impacto causado. Previamente se describe el entorno organizativo y normativo donde se desarrolla la evaluación (apartados 2 y 3, respectivamente) y que permiten analizarla con suficiente perspectiva, tanto en lo que respecta a la finalidad que persigue como a las pretensiones de su diseño. Para completar esta perspectiva, se revisan someramente algunas otras experiencias de evaluación del desempeño que pueden servir de referencia para situar la experiencia que describimos, ya que en su día sirvieron de inspiración. En un comentario final se analizan las conclusiones más importantes de la experiencia de la Generalitat.